Rehabilitación para personas con prótesis de rodilla
El implante de una prótesis de rodilla suele ser la mejor solución para eliminar el dolor y permitir volver a desempeñar sus actividades diarias. En este proceso, la rehabilitación de manos de un experto en fisioterapia se convierte en una pieza esencial.
Probablemente, si ha llegado al punto de tener que someterse a una intervención de prótesis de rodilla acumule un largo período de tiempo con dolores prolongados y disminución de su capacidad de movimiento. Ahora más que nunca es el momento de ser positivo. Su nueva prótesis de rodilla le permitirá recuperar esa movilidad y la calidad de vida que todos deseamos.
La fisioterapia ayuda a recuperar la movilidad en pacientes con prótesis de rodilla
El proceso de rehabilitación tras una intervención de prótesis de rodilla es recomendable que se inicie poco tiempo después de la operación. Habitualmente los tratamientos fisioterapéuticos comienzan en el propio centro hospitalario, donde se suele permanecer alrededor de cuarenta y ocho horas. Una vez que le hayan dado el alta, no debe caer en la dejadez y olvidarse los ejercicios y recomendaciones de los médicos y expertos en fisioterapia.
Es totalmente vital que tome conciencia de que su recuperación está ligada al trabajo constante y paulatino de su pierna con prótesis de rodilla. Una vez que esté en su domicilio y con la ayuda de nuestros expertos en fisioterapia comenzará a realizar ejercicios muy concretos destinados a logar la extensión completa de la articulación y también la flexión, lo más amplia posible, de dicho miembro.
Sabemos que es un proceso largo y no exento de dolor, pero tiene que aprender a verlo como un reto diario. Los consejos y tablas de ejercicios que le propondrán nuestros fisioterapeutas le permitirán escalar día a día un peldaño que le conduzca a la cima; que en este caso no es otra que su rehabilitación y recuperación.
Pero concretemos un poco:
- En las primeras fases de su rehabilitación, el tratamiento de su fisioterapeuta tratará de reducir la inflamación de la rodilla y evitar el riesgo de que aparezcan adherencias y así mejorar el movimiento articular.
- El siguiente paso llegará después de que le quiten las grapas ( alrededor de quince días tras la operación). En ese momento el esfuerzo prioritario del fisioterapeuta se centrará en la cicatriz.
- Después comenzará un trabajo diario con su terapeuta en el que, lo habitual, es realizar veinte minutos de ejercicio, además de caminar. Durante los primeros días caminará con la rodilla en descarga (con muletas) y según avance su evolución se irá incrementando el apoyo de la rodilla con la prótesis.
